Primarias... agárrense que va en bajada

“La unidad pasa por la agregación y la agregación por las primarias”.

Uno de los problemas de aproximarse al tema sobre el mecanismo de selección de candidatos de la plataforma democrática para la Asamblea Nacional, como uno de los aspectos estratégicos más relevantes para abordar con alguna posibilidad de éxito las elecciones del 26 de Septiembre, es que éste –para variar- ha sido secuestrado con el maniqueísmo propio de quien oculta una agenda que, de todas maneras, todo el mundo conoce; por lo tanto, casi se ha cristalizado la reacción de que quien plantee alguna advertencia o, simplemente, su legítima opinión al respecto, si ésta es discordante con los llamados “acuerdos” que en la materia se han adelantado por los integrantes de la Mesa de Partidos, inmediatamente debe tener un viso “divisionista” (reacción parecida a la adjudicación del remoquete de “golpista” que el (des)gobierno blande contra cualquiera que exprese sus diferencias con el desastre en que han convertido a Venezuela) y, por ende, lo sensato es no discutir y así dejar pasar un tiempo valiosísimo que no tendrá repuesto si es mal invertido.

Digámoslo de una vez: esta discusión no puede seguir siendo silenciada, por la índole de las consecuencias que una u otra opción tendría en un evento tan crucial como las elecciones de Septiembre y, al menos en lo que nos toca, considero inexcusable callar la propia visión cuando aún queda tiempo útil para expresarla, aunque ella sea objeto de todas las críticas; porque lo relevante no es eso, sino asegurarnos que al menos tuvo alguna difusión lo que consideramos debe ponderarse estratégicamente para tomar una decisión en ese sentido. Ergo: aquí la planteo:

LOS ELEMENTOS DE JUICIO:

1) Es un hecho incontrovertible que la abstención ha venido comportándose de manera inversamente proporcional a la votación de la Alternativa Democrática, mientras prácticamente no afecta a la votación del oficialismo. La excepción a esta regla ocurrió en el referendo de Dic. 2007, en el que el caudal electoral del oficialismo mermó en un número muy cercano a los 3.000.000 de votantes, respecto de los que habían sufragado por Hugo Chávez para Presidente en el 2006.

Independientemente de lo impropio que sería comparar linealmente ambos actos electorales, dadas las inmensas diferencias que existen en las decisiones a tomar por el cuerpo electoral en una ocasión y en otra (cosa que parecen no tomar en cuenta algunos analistas muy competentes y de buena fe que hemos tenido oportunidad de oír); aún si lo hacemos, lo menos que debemos hacer para obtener una visión congruente y realista de los resultados de los actos electorales posteriores al señalado, es el proceso de corrección necesaria que habrán de experimentar las curvas dado un impacto de la magnitud del señalado, nada menos que una merma en la votación de alrededor de 3 millones de votos en principio favorables al oficialismo, que muy probablemente, se abstuvieron en Dic. 2007.

En ese proceso posterior, el chavismo ha venido recuperando votantes de los que se abstuvieron en esa oportunidad, sin lograrlo completamente, por lo que –obviamente- un componente de la abstención en los comicios posteriores ha sido este universo de votantes; pero el resto de la abstención sigue impactando mayoritariamente a la Alternativa Democrática.

O, como lo he dicho en otra parte: en ella se encuentra una “burbuja” mayoritaria de electores contrarios al régimen, que -sin embargo- no se sienten suficientemente motivados por los actores de la Alternativa Democrática para acudir militantemente a los eventos comiciales.

2) El oficialismo crece en forma directamente proporcional a los aumentos del REP (prácticamente los engulle completamente).

3) La opinión mayoritaria expresada en los sondeos de opinión es que la población electoral, aún la que se encuentra opuesta al derrotero dado por Chávez al país, no se siente representada en los partidos políticos que conforman la oposición. Esto puede gustarnos o no; podemos considerar que es suicida o no, etc. El asunto es que ésa es la realidad.

LA TÁCTICA DE LA “SERVIDUMBRE DE PASO”:

Con arreglo a lo expresado, los partidos políticos existentes han optado, muy previsiblemente y –además- muy legítimamente en circunstancias normales, por lo que llamo la “Táctica de la Servidumbre de Paso”. Como es sabido, cuando -por ejemplo- un fundo no tiene salida a la vía de comunicación principal, el propietario requiere establecer con su vecino que sí la tiene, un acuerdo para transitar por la propiedad de este último a fin de acceder a ella. A esta modalidad se le conoce en derecho como “servidumbre de paso”.

Pues bien, la actitud de los partidos pareciera ser la de decirle al votante: “A ti elector que quieres democracia, pero no tienes la vía de tu gusto para acceder a ella: no tienes más remedio que pasar por nuestros dominios. Sólo a través de ellos podrás llegar a donde quieres ir o, caso contrario, te tendrás que quedar en tu mediterraneidad, te quedarás en el despotismo”.

Lo lamentable es que el análisis de los eventos electorales de los últimos once (11) años, demuestra que un grueso número de los electores prefieren no transitar por esos predios y, sin apoyar tampoco aquello en contra de lo que están, se abstienen. Y, at last but not least, que no nos encontramos en circunstancias normales.

LO LÓGICO:

En consecuencia, es de Perogrullo que se deben abordar las elecciones de Septiembre con una táctica que responda al objetivo estratégico de incorporar a esa gran cantidad de ciudadanos al acto comicial y a que su agregación sea favorable a la Alternativa Democrática. ¿Será que es muy difícil ver que entonces lo mejor es hacerlos participar y comenzar su movilización y organización desde ya? ¿Es tan dificultoso entender que esos compatriotas requieren, además, un acto de legitimación de la oferta electoral de la Alternativa Democrática para acompañarnos?

Ese acto de incorporación participativa y de legitimación popular de la oferta electoral no es otro que la realización de Elecciones Primarias en todo el país, para todos los cargos de la Asamblea… a menos que queramos seguir viendo la misma composición del universo electoral que efectivamente se expresa elección tras elección.

Digo más: el complemento necesario de este planteamiento estratégico, al considerar los efectos del Sistema Electoral aprobado por la Asamblea Nacional en la Ley de Procesos Electorales, es, sin ninguna duda, la Tarjeta Única, pero sobre eso no adelantaré nada más, para no hacer demasiado larga esta Nota. Pero, que no me venga nadie a replicar que eso aparejaría la necesidad de los partidos nacionales de reinscribirse en el CNE, recolectando firmas, por haber quedado “ilegalizados”, porque eso simplemente es falso. Una hipócrita leyenda urbana que fue difundida sin ningún asidero jurídico, sólo para torpedear miopemente esta iniciativa.

EL OFICIALISMO:


Ahora bien, hete aquí que al presente, además, el oficialismo anuncia que ellos sí van a realizar primarias. Y, la reacción de los voceros de la Alternativa Democrática es que eso no es más que un simulacro, que allí se impone la voluntad del mandamás y que los verdaderos demócratas somos nosotros ¡que ni simulacro haremos! Es que hay que oír cada cosa.


El problema, querido(a) lector(a) no es si las primarias oficialistas son un simulacro o no; sino qué se encuentra detrás de una práctica tan reñida con las maneras y desmanes del “Máximo Líder”. Sin duda que lo primero es el contraste con el planteamiento básico y real que se encuentra subyacente en la confrontación: Nosotros somos Democracia y Libertad (y no llamamos a elecciones primarias); Chávez y su combo son Totalitarismo Comunista y Satrapía (y sí llaman a elecciones primarias). Después nadie se sorprenda de que arremetan con lo de “disociados”.


Pero, también, allí se encuentra algo sobre lo que ya hemos advertido con anterioridad: el Artículo 67 de la Constitución Nacional. A la letra establece:

“Artículo 67. Todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de asociarse con fines políticos, mediante métodos democráticos de organización, funcionamiento y dirección. Sus organismos de dirección y sus candidatos o candidatas a cargos de elección popular serán seleccionados o seleccionadas en elecciones internas con la participación de sus integrantes”.

¿Qué creen que harán los oficialistas, con esta norma? ¿Nada? ¿Y eso, como por qué?  ¿Porque ellos son muy chéveres?


Es necesario que seamos de la altura de las circunstancias. La unidad pasa por la agregación y la agregación por las primarias. Esa es la vía para acercarnos al triunfo en Septiembre de este año. Y, es la más inteligente táctica, incluso para los partidos políticos.